Invierte combinando una posición central del 60% y un máximo del 75% en acciones de compañías cotizadas principalmente de la bolsa española, materias primas y capital riesgo, y el resto en renta fija en euros , bonos ligados a la inflación y depósitos. Se persiguen oportunidades de inversión en acciones con alto dividendo, infravaloradas por el mercado, y en acciones corporativas o que presenten situaciones de especial interés.